Luis Martz
En lo alto de una abrupta serranía
Acampado se encontraba un regimiento
Y una moza que valiente lo seguía
Locamente enamorada del sargento
Popular entre la tropa era Adelita
La mujer que el sargento idolatraba
Porque a mas de ser valiente era bonita
Y hasta el mismo coronel la respetaba
Y se oía que decía aquel que tanto la quería....
Y si Adelita fuera mi novia,
Y si Adelita fuera mi mujer,
Le compraría un vestido de seda
para llevarla a bailar al cuartel
Y si Adelita se fuera con otro
La seguiría por tierra y por mar
Sí por mar en un buque de guerra
Sí por tierra en un tren militar
Y si acaso yo muero en la guerra,
Y si mi cuerpo en la sierra va a quedar,
Ay, Adelita, por Dios te lo ruego,
Que por mis huesos no vayas a llorar.
Si Adelita quisiera ser mi esposa,
Si Adelita ya fuera mi mujer,
Le compraría un vestido de seda
Para llevarla conmigo al edén.
LA BAMBA
D.P.
Para bailar la bamba
se necesita
una poca de gracia
y otra cosita.
!Ay, arriba y arriba,
y arriba iré!
Yo no soy marinero,
por ti seré.
Para subir al cielo
se necesita
una escalera grande
y otra chiquita.
Una vez que te dije
que eras bonita,
se te puso
la cara coloradita.
Cada vez que te miro,
se me endereza. . .
la pupila del ojo
por tu belleza.
!Ay, arriba y arriba,
y arriba iré!
Yo no soy marinero
por ti seré.
!Ay!, te pido y te pido
por compasión
que se acabe La bamba
y venga otro son.
LA BARCA DE GUAYMAS
D.P.
Al golpe del remo se agita en las olas
ligera la barca,
y al ruido del agua se ahonda la ausencia
que hay en mi alma.
Mi amor angustiado por tantos pesares
en vano te llama,
pues te hallas muy lejos, y sola,
muy sola se encuentra mi alma.
Cansado viajero que llegas al puerto
de tierras lejanas,
qué extraño piloto condujo tu barca
sin remos ni anclas.
De qué región vienes que has hecho pedazos
tus velas tan blancas,
si tú estás cantando, yo vengo trayendo
la muerte en el alma.
Yo soy el viajero que alegre de Guaymas
salí una mañana,
llevando en mi alma, como ave piloto,
mi dulce esperanza.
Mi amor angustiado por tantos pesares
en vano te llama,
pues te hallas muy lejos, y sola,
muy sola se encuentra mi alma.
LA BARCA DE ORO
D.P. Arreglo de Abundio Martínez
Yo ya me voy al puerto donde se halla
la barca de oro que debe conducirme.
Yo ya me voy, sólo vengo a despedirme,
adiós, mujer, adiós, para siempre adiós.
No volverán tus ojos a mirarme
ni tus oídos escucharan mi canto.
Voy a aumentar los mares con mi llanto,
adiós mujer, adiós, para siempre adiós.
LA CAMA DE PIEDRA
Cuco Sánchez
De piedra ha de ser la cama
de piedra la cabecera,
la mujer que a mí me quiera,
me ha de querer de a de veras,
Ay, ay, corazón porqué no me amas.
Subí a la sala del crimen
le pregunté al presidente
que si es delito quererte,
que me sentencien a muerte,
Ay, ay, corazón porqué no amas.
El día que a mí me maten
que sea de cinco balazos
y estar cerquita de ti
para morir en tus brazos
Ay, ay, corazón porqué no amas.
Por caja quiero un sarape
por cruz mis dobles cananas
y escriban sobre mi tumba
mi último adiós con mis balas
Ay, ay, corazón porqué no amas.
LA CHANCLA
Alfonso Esparza Oteo
"Creibas" que no había de hallar
amor como el que perdí,
tan al pelo lo "jallé"
que ni me acuerdo de ti.
Una sota y un caballo,
burlarse querían de mí, !hay!
mal haya quien dijo miedo
si para morir nací.
Amigos, le contaré
una "aición" particular.
Si me "queren" se querer,
si me olvidan se olvidar.
Nomás un orgullo tengo,
que a "naiden" le se rogar, !ay!,
que la chancla que yo tiro
no la vuelvo a levantar.
LA CÁRCEL DE CANANEA
D. P.
Voy a dar un pormenor
de lo que a mí me ha pasado: (bis)
que me han agarrado preso,
siendo un gallo tan jugado. (bis)
Me fui para el Agua Prieta
a ver quién me conocía, (bis)
y a las once de la noche
me aprehendió la policía. (bis)
Me aprehendieron los gendarmes
al estilo americano: (bis)
como era hombre de delito
todos con pistola en mano. (bis)
La cárcel de Cananea
se edificó en una mesa, (bis)
y en ella fui procesado
por causa de mi torpeza. (bis)
Despedida no les doy
porque no la traigo aquí, (bis)
se la deje al Santo Niño
y al Señor de Mapimí.(bis)
Ya con esta me despido
por las hojas de un granado, (bis)
aquí se acabó el corrido
de este gallo bien jugado.(bis)
LA CASITA
Felipe Llera y Manuel José Othón
¿Que de dónde amigo vengo?
De una casita que tengo
más abajo del trigal.
Una casita chiquita
para una mujer bonita
que me quiera acompañar.
En el frente hay unas parras
donde cantan las cigarras
y se hace polvito el sol.
Un portal hay en el frente,
en el jardín una fuente
y en la fuente un caracol.
Yedras la tienen cubierta
y un jazmín hay en la huerta
que las bardas ya cubrió.
En el portal una hamaca,
en el corral una vaca
y adentro mi perro y yo.
Bajo un ramo que la tupe,
la Virgen de Guadalupe
esta en la sala al entrar;
ella me cuida si duermo,
me vela si estoy enfermo
y me ayuda a cosechar.
Más adentro está la cama,
muy olorosa a retama,
limpiecita como usté.
Tengo también un armario,
un espejo y un canario
que en la feria me merqué.
Pues con todo y que es bonita,
que es muy chula mi casita
siento al verla un no sé qué.
Me he metido en la cabeza
que hay allí mucha tristeza,
creo que porque falta usté.
Me hace falta allí una cosa,
muy chiquita y muy graciosa,
más o menos como usté.
Pa' que le cante el canario,
eche ropa en el armario
y aprenda lo que yo sé.
Si usté quiere la convido
pa' que visite ese nido
que hay abajo del trigal,
le echo la silla al lucero
y él nos llevará ligero
hasta en medio del corral.
Y si la noche nos coge
y hay tormenta que nos moje
tenga usté confianza en Dios,
que en casa chica y extraña
no nos faltara una mana
pa' vivir allí los dos.
Y si la casa le gusta
y si al año no se asusta,
con la bendición de Dios
para colmo de delicias
repartirá sus caricias
a un chamaco, al perro y yo.
LA EMBARCACIÓN
D.P.
Ya se va la embarcación,
ya se va por vía ligera,
se lleva a mi compañera,
!ay!, la dueña de mi amor.
No lloro porque te vas,
ni lloro porque te alejas,
lloro porque a mí me dejas
herido del corazón.
Al otro lado del río
tengo una tienda en unión,
con un letrero que dice:
ya se va la embarcación.
Cuando salí de mi tierra
yo me quería devolver,
!ay!, que amargas son las horas
pa'l que tiene que volver.
Despedida no les doy
porque no la traigo aquí,
se las deje en California
pa' que se acuerden de mí.
Ya se va la embarcación,. . .
LA FERIA DE LAS FLORES
Chucho Monge
Me gusta cantarle al viento
porque vuelan mis cantares,
y digo lo que yo siento
por toditos los lugares.
Aquí vine porque vine
a la feria de las flores,
no hay cerro que se me empine
ni cuaco que se me atore.
En mi caballo retinto
he venido de muy lejos,
y traigo pistola al cinto
y con ella doy consejos.
Atravesé la montaña
pa' venir a ver las flores;
aquí hay una rosa huraña,
que es la flor de mis amores.
Y aunque otro quiera cortarla
yo la devisé primero,
y juro que he de robarla
aunque tenga jardinero.
Yo la he de ver trasplantada
en el huerto de mi casa,
y si sale el jardinero
pos a ver. . . a ver qué pasa.
LÁGRIMAS DEL ALMA
Bonny Villaseñor
Después de un día lluvioso
el cielo se oscurece,
ahí es donde comienza
mi pecho a suspirar.
Recuerdo aquella tarde
de nuestra despedida,
pues era un día como éste
que no podré olvidar.
Por eso cuando llueve
me lleno de recuerdos,
y con tristeza espero
la horrible oscuridad.
Las lágrimas del alma
semejan esta lluvia,
la noche con su manto
tendrá su día de luz.
Sumido en el letargo
el pensamiento implora,
que aclare nuestro cielo
y vuelva a ser feliz.
Por eso cuando llueve. . .
LAGUNA DE PESARES
Tomás Méndez
Por mis canciones sabrás
como me la ando pasando,
rumbos y amores distintos
ando en el mundo probando.
Ya vez mancornadora,
y a que te supo ese trago.
Con quién te quejas
si tú mal te lo buscaste,
y a quién le importan
tus lagunas de pesares.
Has de entender que en amor
debemos ser pares.
Ahórrame el sentimiento
de verte llorando por mí.
LA HIGUERA
D.P.
Ya la higuera se secó,
ya tiene la raíz de fuera,
ya mi prieta no me quiere
porque ando en la borrachera.
!Ay!, qué torres tan retealtas,
cómo no las tira el aire,
y el que no lo quiera creer
que vaya y vuelva más tarde.
!Ay!, qué paredes tan altas
para mí, tan chaparrito!
quisiera ser albañil
para bajarlas tantito.
Al pasar por un panteón
me dijo la calavera:
--Ya tengo tu casa lista
para cuando tú te mueras.
Venderemos toro y vaca,
venderemos la becerra,
toditito venderemos, mi vida,
todito menos la tierra.
Venderemos toro y vaca,
venderemos la marrana,
toditito venderemos, mi vida,
todito menos la cama.
LA INTERESADA
Chava Flores
Si yo te bajara el sol. . .
!quemadota que te dabas!. . . !habas!
Si te bajara la luna. . .
)
cómo diablos la cargabas?. . . !habas!
Si te bajara una estrella,
vida mía, te "dislumbrabas". . .
!Mejor no. . . no te bajo el sol,
ni la luna ni la estrella
pa' que no te pase nada!
!Mejor no te bajo el sol,
ni la luna ni la estrella,
no seas tan interesada!
Si a ti te ofreciera el mar
yo te apuesto que te ahogabas. . . !habas!
Si te ofreciera un millón
de un calambre te estirabas. . . !habas!
Si te llevo a Nueva York,
de seguro ahí me dejabas. . .
!mejor no. . . no te ofrezco el mar
ni el millón ni Nueva York
pa' que no te pase nada!
!Mejor no te ofrezco el mar
ni te llevo a Nueva York,
no seas tan interesada!
Si yo te diera mi amor. . .
!la armadota que te dabas!. . . !habas!
Si te hablara con pasión. . .
!qué soba me acomodabas!. . . !habas!
Si te hiciera una canción
con el otro la cantabas. . . !habas!
!Mejor no. . . no te doy mi amor
ni te ofrezco mi canción
pa' que no te pase nada!
!Mejor no te doy mi amor
y le sigo al vacilón. . .
tú eres muy interesada!
LA LLORONA
D.P.
Todos me dicen el Negro, llorona,
negro, pero cariñoso.
Todos me dicen el Negro, llorona,
negro, pero cariñoso.
Yo soy como el chile verde, llorona,
picante pero sabroso.
Yo soy como el chile verde, llorona,
picante pero sabroso.
!Ay, de mí!, llorona,
llorona de azul celeste.
!Ay, de mí!, llorona,
llorona de azul celeste.
Aunque la vida me cueste, llorona,
no dejaré de quererte.
Aunque la vida me cueste, llorona,
no dejaré de quererte.
Si al cielo subir pudiera, llorona,
las estrellas te bajara.
Si al cielo subir pudiera, llorona,
las estrellas te bajara.
La luna a tus pies pusiera, llorona,
con el sol te coronara.
La luna a tus pies pusiera, llorona,
con el sol te coronara.
!Ay, de mí!, llorona, llorona
llévame al río.
!Ay, de mí!, llorona,
llorona llévame al río.
Tápame con tu rebozo, llorona,
porque me muero de frío.
Tápame con tu rebozo, llorona,
porque me muero de frío.
No sé qué tienen las flores, llorona,
las flores del camposanto.
No se que tienen las flores, llorona,
las flores del camposanto.
Que cuando las mueve el viento, llorona,
parece que están llorando.
Que cuando las mueve el viento, llorona,
parece que están llorando.
!Ay de mí!, llorona, llorona
tú eres mi shunca.
!Ay de mí!, llorona,
llorona tú eres mi shunca.
Me quitarán de quererte, llorona,
pero de olvidarte nunca.
Me quitarán de quererte, llorona,
pero de olvidarte nunca.
Las campanas claro dicen, llorona,
sus esquilas van doblando.
Las campanas claro dicen, llorona,
sus esquilas van doblando.
Si mueres, muero contigo, llorona,
si vives te sigo amando.
Si mueres, muero contigo, llorona,
si vives te sigo amando.
LA MALAGUEÑA
Elpidio Ramírez
!Qué bonitos ojos tienes
debajo de esas dos cejas!,
debajo de esas dos cejas
!qué bonitos ojos tienes!
Ellos me quieren mirar,
pero si tú no los dejas,
pero si tú no los dejas
ni siquiera parpadear.
Malagueña salerosa,
besar tus labios quisiera,
besar tus labios quisiera,
malagueña salerosa.
Y decirte niña hermosa,
que eres linda y hechicera,
que eres linda y hechicera,
como el candor de una rosa.
Malagueña salerosa,. . .
Si por pobre me desprecias,
yo te concedo razón,
yo te concedo razón,
si por pobre me desprecias.
Yo no te ofrezco riquezas,
te ofrezco mi corazón,
te ofrezco mi corazón,
en medio de mis pobrezas.
Malagueña salerosa,. . .
LA MANCORNADORA
Manuel Esquibel
Ando ausente del bien que adoré,
apasionado por una mujer,
sólo tomando disipo mis penas
con las copas llenas para divagar.
Y si lo hiciste con mala intención,
o con el fin de hacerme padecer,
pues ten en cuenta que vivo entre flores
y nuevos amores me pueden querer.
Si tú fueras legal con mi amor
tú gozarías de mi protección,
pero en el mundo tú fuiste traidora
la mancornadora de mi corazón.
La despedida yo no se las doy
la despedida será una canción,
la despedida yo se las daré
cuando yo me vaya de esta población.
LA MARTINA
Arreglo de Consuelo Castro
Quince años tenía Martina
cuando su amor me entrego,
a los diez y seis cumplidos
una traición me jugo.
Y estaban en la conquista
cuando el marido llego:
!Que estas haciendo Martina,
que no estas en tu color!
Aquí m'estado sentada,
no me he podido dormir,
si me tienes desconfianza
no te separes de mí.
De quién es esa pistola
de quién es ese reloj
de quién es ese caballo
que en el corral relinchó.
Ese caballo es muy tuyo,
tu papá te lo mandó,
pa' que fueras a la boda
de tu hermana la menor.
Yo pa' que quero caballo
si caballos tengo yo,
lo que quero es que me digas
quien en mi cama durmió.
En tu cama naiden duerme
cuando tú no estás aquí,
si me tienes desconfianza
no te separes de mí.
Y la tomó de la mano
y a sus papás la llevó,
suegros aquí está Martina
que una traición me jugó.
"Llevátela" tú mi yerno,
la Iglesia te la entregó,
y si ella te ha traicionado
la culpa no tengo yo.
Hincadita de rodillas
nomás seis tiros le dió,
y el amigo del caballo
ni por la silla volvió.
LA NEGRA NOCHE
Emilio D. Uranga
La negra noche tendió su manto,
surgió la niebla, murió la luz,
y en las tinieblas de mi alma triste
como una estrella brotaste tú.
Ven, ilumina la árida senda
por donde vaga loca ilusión,
dame tan sólo una esperanza
que fortifique mi corazón.
Como en las noches nace el rocío
y en los jardines nace la flor,
así en mi alma, niña adorada,
nació mi amor.
Ya veo que asoma tras la ventana
tu rostro de ángel encantador,
siento la dicha, dentro de mi alma
no hay tinieblas, ya no hay tinieblas,
ya salió el sol.
LA NORTEÑA
J.F. Elizondo y Eduardo Vigil y Robles
Tiene los ojos tan zarcos
la norteña de mis amores,
que si miro dentro de ellos
me parecen los destellos
de las piedras de colores.
Cuando me miran contento
me parecen jardín de flores,
y si lloran me parece
que se van a deshacer,
linda no llores.
Verdes son,
cual del monte la falda,
verdes son
del color de esmeralda.
Sus ojitos me miraron
y esa noche me mato
con su mirada.
Yo no sé
lo que tienen sus ojos,
Si me ven
con las luces del querer.
Y si lloran me parece
que se van a deshacer,
linda no llores.
LA PALMA
D.P.
Aquí traigo un sentimiento
que me agobia y que me mata,
de acordarme de la ingrata
que trató de abandonarme;
no quisiera ni acordarme
de esa ingrata y cruel mujer,
que siendo yo su querencia
no me supo corresponder.
Yo le pregunté a la palma
que si estaba en el floreo,
pa' mandarle por correo
cuatro suspiros del alma;
!pobrecita de la palma,
con el sol se marchitó!,
y así se marchita mi alma
cuando tú le dices que no.
LA PANCHITA
Joaquín Pardavé
Aquella que va río abajo
se llama Panchita,
y tiene los ojos grandes,
la boca chiquita.
No sé qué siento cuando me mira,
mamita del alma,
que esa Panchita recondenada
me roba la calma.
Y cuando me ve enojado se ríe
y se "carcájea",
y luego me ve temblando
y me llena de labia.
No sé qué hacerle mamá querida
pa' que me "quera",
que esa Panchita me tiene loco
con su vacilón.
Platica con los rancheros
la prieta maldita,
y entre ellos parece
pila del agua bendita.
Yo hago corajes y trago bilis
mamita del alma,
cuando platica con los rancheros
ya no tengo calma.
Me cita para la noche
y me tira mi plancha,
malhaya que así se burle
de mi la tal Pancha.
No sé qué hacerle mamá querida
pa' que me "quera",
que esa Panchita me tiene loco
con su vacilón.
LA PARRANDA
Gabriel Ruiz
!Ay. cuánto me gusta el gusto
y toda la parranda
y todo se me va en beber!
!Qué haré para enamorar
a esa pérfida mujer!
!Ay, cuánto me gusta el gusto. . .
Bello es amar, a una mujer,
a una mujer, que sepa amar.
Porque el amor
es traicionero
soy parrandero,
para qué lo he de negar.
Ay, cuánto me gusta el gusto. . .
Pero !ay, Jesús qué voy a hacer
si en el amor todo es perder!
Porque el amor es traicionero,
soy parrandero,
para qué lo he de negar.
!Ay, cuánto me gusta el gusto. .
LA QUE SE FUE
José Alfredo Jiménez
Tengo dinero en el mundo,
dinero maldito que nada vale,
aunque me miren sonriendo
la pena que traigo ni Dios la sabe,
yo conocí la pobreza,
y allá entre los pobres jamás lloré.
Yo pa' que quiero riqueza
si voy con el alma perdida y sin fe,
yo lo qué quiero es que vuelva,
que vuelva conmigo la que se fue.
Si es necesario que llore
la vida completa, por ella lloro,
de que me sirve el dinero,
si sufro una pena, si estoy tan sólo.
Puedo comprar mil mujeres
y darme una vida de gran placer,
pero el cariño comprado
ni sabe querernos ni sabe ser fiel.
Yo lo que quiero es que vuelva,
que vuelva conmigo la que se fue.
LAS GAVIOTAS
Manuel Esquivel
¿Queacute andan haciendo esas gaviotas?,
)
qué andan haciendo a orillas del mar?Andan buscando nidos de amores,
nidos de amores encontrarán.
!Ay!, cómo brilla tu negro pelo,
como las olas al reventar,
miles de conchas tiene la arena,
hermosas perlas tiene la mar.
Si quieres vamos en mi barquilla,
si quieres vamos, te llevaré,
y cuando estemos en la otra orilla
nuevas canciones te cantaré.
!Ay!, que bonito es tener amores
en estas tierras que Dios formó,
dame un abrazo, dame un besito,
para vivir más contento yo.
Ya las gaviotas tienden su vuelo
y abren sus alas para volar
andan buscando nidos de amores,
nidos de amores encontrarán.
LAS ISABELES
D. P.
Del corazón de una palma
nacieron las Isabeles,
delgaditas de cintura
y de corazón alegre.
Al pasar un arroyuelo
a la sombra de un laurel,
recogía cabellos de oro
donde se peinó Isabel.
Ven, querida, ven,
que es la canción de la Isabel,
es tan bella como una rosa
y es tan linda como un clavel.
Qué bonitos dientes tienes,
dientes color de marfil,
yo me casaría contigo
primero por lo civil.
Qué bonitos labios tienes,
labios color de manzana;
si tú me correspondieras
yo los probaría mañana.
Ven, querida, ven,. . .
LAS REJAS NO MATAN
Tomás Méndez
Si hasta en mi propia cara
coqueteabas, mi vida,
qué será a mis espaldas,
y yo preso por ti.
Unos guardias me han dicho
que ya tú andas perdida,
y que ya ni te acuerdas
lo que hiciste de mí.
Que rumbo tomaste, mi vida,
qué puerta a tu paso se abrió,
qué luna, qué espera angustiada,
oyendo tu nombre, oyendo mi voz.
Qué labios te cierran los ojos,
los ojos que a besos cerré,
auroras que son puñaladas,
las rejas no matan
pero si tu maldito querer.
LA SANMARQUEÑA
Pbro. Emilio Vásquez
San Marcos tiene la fama
de las mujeres bonitas,
San Marcos tiene la fama
de las mujeres bonitas;
también Acapulco tiene
de diferentes caritas.
Sanmarqueña de mi vida,
sanmarqueña de mi amor.
Ya llegué, ya estoy aquí,
ahora acabo de llegar,
ya llegué, ya estoy aquí,
ahora acabo de llegar;
si nuevos amores tienes
ya los puedes retirar.
Sanmarqueña de mi vida,
sanmarqueña de mi amor.
A la mar fui por naranjas,
cosa que la mar no tiene,
a la mar fui por naranjas,
cosa que la mar no tiene;
el que vive de esperanza
la esperanza lo mantiene.
Sanmarqueña de mi vida,
sanmarqueña de mi amor.
Quien te puso Sanmarqueña
no te supo poner nombre,
quien te puso Sanmarqueña
no te supo poner nombre;
que mejor te hubiera puesto
la perdición de los hombres.
Sanmarqueña de mi vida,
sanmarqueña de mi amor.
Las mujeres y los gatos
son de la misma opinión,
las mujeres y los gatos
son de la misma opinión;
que teniendo carne en casa
salen a buscar ratón.
Sanmarqueña de mi vida,
sanmarqueña de mi amor.
LA TUMBA DE VILLA
Pepe Albarrán
!Cuántos jilgueros y zenzontles veo pasar!
pero que tristes cantan esas avecillas.
Van a Chihuahua a llorar sobre Parral
donde descansa el General Francisco Villa.
Lloran al ver aquella tumba
donde descansa para siempre el General;
sin un clavel, sin flor ninguna,
solo hojas secas que le ofrenda el vendaval.
De sus Dorados nadie quiere recordar,
que Villa duerme bajo el cielo de Chihuahua:
sólo las aves que gorjean sobre Parral,
van a llorar sobre la tumba abandonada.
Solo uno fué, sin olvidarlo,
a su sepulcro una oración a murmurar:
amigo fiel, cual buen soldado,
junto a tu tumba estoy presente !General!
LA VAQUILLA
D.P.
Por el filo de la sierra
viene un gavilán volando,
por el filo de la sierra
viene un gavilán volando,
gallina que no me llevo
la dejo cacaraqueando,
gallina que no me llevo
la dejo cacaraqueando.
!Hey, hey, hey!
La vaca era colorada
y el becerrito era moro,
la vaca era colorada
y el becerrito era moro,
me puse a considerar
de qué color será el toro,
me puse a considerar
de qué color será el toro.
!Hey, hey, hey!
Yo vide pelear un toro
con una vaca morena,
yo vide pelear un toro
con una vaca morena,
no hay bocado más sabroso
que el de la mujer ajena,
no hay bocado más sabroso
que aunque la propia esté buena.
!Hey, hey, hey vaca,
hey, vaca, hey!
LA VERDOLAGA
R. Fuentes y A. Cervantes
!Ay!, de aquél que a las mujeres
les da el amor y el dinero,
cuando menos se lo piensa
se queda en el puro cuero.
Por eso yo vivo errante
sin confiar en la mujer,
cariñitos de un instante
y no volvernos a ver.
Por eso yo vivo errante. . .
No hay que estar comprometido
en las cosas del querer,
solteras o con marido
siempre es buena la mujer.
Aunque me veas inocente
en las cosas del amor,
no me gusta lo corriente,
consumo de lo mejor,
Aunque me veas inocente. . .
Los amores más bonitos
son como la verdolaga,
nomás le pones tantito
y crecen como una plaga.
Y tienes otra ventaja
si cultivas ese amor,
que cuando ya se te pasa
con un jalón se acabó.
Y tienes otra ventaja. . .
LOS BARANDALES DEL PUENTE
Arr. Rafael Palomar A.
Los barandales del puente
se estremecen cuando paso
chinita mía, dame un abrazo.
Dame tu mano, morena,
para subir al tranvía
que está cayendo la nieve fría.
Si está cayendo que caiga
y asómate a tu ventana,
morena mía, dueña de mi alma.
Si está cayendo que caiga
y asómate a tu balcón,
dame un besito de corazón.
De todas a ti te quiero,
de las demás no hago caso,
chinita mía, dame un abrazo.
De todas a ti te quiero,
de las demás a ninguna,
chinita mía, luz de la luna.
Por debajo de aquel puente,
corre el agua y nacen flores,
chinita mía de mis amores.
Las blancas son muy bonitas
y las morenas hermosas,
guardan su amor entre las rosas.
De todas a ti te quiero
y por eso lo repito,
morena mía, dame un besito.
Y estos son los barandales
conmigo nomás tres piedras
y más arriba tres pedernales.
Dame la mano, morena,
para subir a tu nido,
no duermas sola, duerme conmigo.
Ya con esta me despido
entre perfumes y azahares,
aquí se acaban los barandales.
LOS DOS HERMANOS
Juan Mendoza
Este es el nuevo corrido
que yo les vengo a cantar
de dos hermanos muy buenos
que tuvieron que pelear. . .
Juan Luis uno se llamaba
y el otro José Manuel,
y empezaron las discordias
por una mala mujer. . .
Llego Juan Luis a una fiesta
con la mujer que él quería,
esto presente lo tengo
el año treinta corría. . .
En esto llegó su hermano
con su guitarra en la mano
y empezó cantando versos
como retando a su hermano.
--Mira, Juan Luis, qué te digo
esa mujer ya fue mía.
--No tengo la culpa, hermano,
eso yo no lo sabía. . .
A su muy buena pistola
José Manuel echo mano,
de dos balazos mató
a la mujer de su hermano. . .
--José Manuel, lo que has hecho
hoy mismo te va a pesar,
mataste lo que más quería,
con tu vida has de pagar.
Se salieron para afuera
y se oyeron dos disparos,
y en el quicio de una puerta
los dos hermanos quedaron. . .
LOS LAURELES
D. P.
!Ay que laureles tan verdes!
!qué flores tan encendidas!,
si piensas abandonarme
mejor quítame la vida,
alza los ojos a verme
si no estás comprometida
Eres flor de "jocuixtle"
que sólo en mayo se ve,
quisiero hacerte un "invite"
pero la "verda" no sé,
si tienes quien te lo evite
mejor me separaré.
Eres la flor de algodón
que vives en el capullo
!Ay que tristeza me dá
cuando te llenas de orgullo
de ver a mi corazón
enredado con el tuyo!
Ahí les va la despedida
chinita por tus quereres
la perdición de los hombres
son las ingratas mujeres
aquí se acaban cantando
los versos de los laureles.
LLEGANDO A TI
José Alfredo Jiménez
Poco a poco me voy acercando a ti,
poco a poco la distancia se va haciendo menos;
yo no se si tú vives pensando en mí
porque yo sólo pienso en tu amor y en tus besos.
Qué bonito es querer como quiero yo,
qué bonito entregarse todito completo,
yo no sé ni pregunto cómo es tu amor
pero a ti como a mí no nos cabe en el pecho.
No me digas que no sufriste,
que no extrañaste todos mis besos,
no me digas que no lloraste
algunas noches que estuve lejos.
Poco a poco me voy acercando a ti,
poco a poco se me llenan los ojos de llanto;
qué bonito es llorar cuando lloro así,
con tu amor, junto a ti y adorándote tanto.
No me digas que no sufriste,. . .
LLORARAS
Rafael Ramírez
Llorarás, llorarás
mi partida,
aunque quieras arrancarme
de tu ser.
Cuando sientas el calor
de otras caricias,
mi recuerdo ha de brillar
donde tú estés.
Has de ver que mi amor
fue sincero
y que nunca comprendiste
mi penar.
Cuando sientas
la nostalgia
por mis besos
llorarás, llorarás, llorarás.
Has de ver que mi amor
fue sincero
y que nunca
comprendiste mi penar.
Cuando sientas. . .
Copyright © 1998 [Luis Alfonso Domínguez Carballo, Delegado Estatal de las Olimpiadas Nacionales de Física en el Estado de Sonora]. ldoming@fisica.uson.mx. Reservados todos los derechos. Revisado:17 de enero de 2003.